Medusa aterriza en la nieve. Marchica acogerá su primer takeover invernal con Vini Vici como primeros artistas confirmados
Tras cerrar un verano histórico y ser reconocido como Mejor Festival de España en los Vicious Music Awards, el gigante Medusa Festival ha decidido emprender una aventura inédita, trasladar su universo sonoro y escénico a la nieve. El próximo 17 de enero, el festival valenciano firmará un takeover sin precedentes en Marchica Experience, el icónico après-ski de la estación de Aramón Formigal-Panticosa, para inaugurar una nueva era en la que la electrónica también se celebra a pie de pista.
Será la primera incursión invernal del festival, un hito que promete redefinir la forma de vivir la música en alta montaña. Y no llegará tímidamente, el equipo creativo del festival viajará al Pirineo aragonés para desplegar una producción audiovisual de gran formato, muy lejos de lo que suele verse en un espacio de esquí y ocio. Ceremonia de apertura al más puro estilo Medusa, pirotecnia, show de drones sobre un manto blanco y toda la iconografía fantástica que ha hecho del festival una referencia europea. Todo ello, rodeado de cimas que rozan los 2.500 metros y acompañado del ambiente único de Marchica.
Vini Vici, primer confirmado: psy-trance en la nieve
Como primer avance del cartel, Medusa ha anunciado al dúo israelí Vini Vici, actualmente en el #32 del Top 100 de DJ Mag. Pocas cartas de presentación son tan solventes: son referentes absolutos del psy-trance moderno, capaces de unir melodía, espiritualidad y energía frenética en sesiones que conectan con públicos de todos los rincones del mundo.
Su presencia asegura una experiencia sonora inédita en un enclave como Marchica, un escenario donde la música suele acompañar las tardes après-ski, pero que rara vez acoge proyectos de esta envergadura. Para Medusa, el objetivo es claro: diseñar un lineup accesible, electrónico y diverso, manteniendo la identidad festivalera pero adaptándose al espíritu diurno y festivo de la estación.
El festival adelantó que en las próximas semanas se confirmarán nuevos artistas que completarán un cartel pensado para un público heterogéneo, desde amantes de la electrónica más mainstream hasta seguidores de sonidos más contundentes.
Marchica: el templo après-ski más famoso de España
Hablar de Marchica es hablar de un fenómeno sociocultural dentro del mundo del esquí. Inaugurado en 2009 y construido con madera original procedente de antiguos establos tiroleses, el local fusiona tradición alpina con la cultura festiva española. Durante el día funciona como punto gastronómico y social, pero es al caer la tarde cuando su terraza exterior se transforma en un auténtico santuario clubber al aire libre.
Allí, cientos de esquiadores, aún con ropa técnica y las marcas del día en la nieve, brindan, bailan y celebran mientras el sol cae tras las cumbres. Ese ritual après-ski ha convertido a Marchica en uno de los espacios más singulares de Europa y en un atractivo fundamental para los visitantes de Formigal-Panticosa.
Que Medusa desembarque en esta localización supone un encuentro entre dos gigantes del ocio: por un lado, un festival que reúne cada verano a más de 50.000 asistentes diarios; por otro, un après-ski cuya atmósfera y reputación atraen a decenas de miles de aficionados a la nieve cada temporada.
Un evento único con entradas ya disponibles
El takeover Medusa x Marchica nace para convertirse en un formato especial dentro del calendario invernal. Un choque entre música, tecnología y paisaje natural que permitirá a los asistentes vivir una experiencia festivalera en un entorno totalmente distinto al habitual.
Las entradas ya están a la venta desde 21 € en la web oficial de Marchica Experience. Y todo apunta a que volarán: la combinación de nieve, electrónica y producción de alto nivel es demasiado irresistible para la comunidad fan del festival y para los habituales de la estación.
Medusa empieza el año pisando fuerte. Esta vez, dejando huella en la nieve. ¿Será el primer capítulo de una nueva tradición invernal? Si algo ha demostrado el festival, es que su imaginación y sus fronteras no dejan de expandirse.

